Tras una audiencia fallida celebrada el 26 de diciembre en la Secretaría de Trabajo, el Sindicato Único de Trabajadores del Neumático Argentino (Sutna) ratificó un plan de lucha contundente ante lo que califican como una estrategia de "desgaste y mala fe" por parte de las patronales.
La medida de fuerza consistirá en un paro total de actividades que se extenderá por 25 horas: comenzará a las 13:00 del martes 30 de diciembre y finalizará a las 14:00 del miércoles 31. La huelga estará acompañada por una movilización de los trabajadores hacia la sede de la cartera laboral para exigir una recomposición inmediata de los haberes adeudados.
El titular del sindicato, Alejandro Crespo, denunció que las compañías intentan imponer una rebaja del salario real amparándose en una supuesta "crisis profunda" del sector. Sin embargo, el gremio advierte una irregularidad legal: "Las empresas nunca presentaron documentación respaldatoria, como los balances contables, que acrediten esa crisis, pese a estar obligadas por ley".
Para los trabajadores, la negativa a abrir los libros contables demuestra que las firmas buscan congelar las paritarias 2024-2025 de manera arbitraria, utilizando la recesión como excusa para disciplinar el ingreso de los operarios.
La respuesta de las fábricas
Del otro lado del mostrador, las empresas (FATE, Pirelli y Bridgestone) rechazaron las acusaciones de dilación y devolvieron la gentileza: acusan al sindicato de tener una "falta de entendimiento de la realidad económica". Según las patronales, la actividad está operando apenas al 50% de su capacidad instalada, un derrumbe productivo que, aseguran, hace imposible convalidar los reclamos salariales.
En un tono más duro, FATE calificó las medidas de fuerza como "intempestivas e ilegítimas" y advirtió que los paros ponen en riesgo la seguridad de las plantas y la continuidad productiva, reservándose el derecho de iniciar acciones judiciales contra el gremio.
