Fue catalogada como la película más "salvaje", transcurre en una cueva y vuelve al cine a 20 años de su estreno

El descenso, clásico del cine de terror de 2005, será el primer reestreno en salas del 2026.

31 de diciembre, 2025 | 13.30

A 20 años de consagrarse como hit del horror slasher de supervivencia protagonizado por una tropa de mujeres rudas combatiendo a un grupo de neandertales subterráneos ciegos y muy hambrientos, El Descenso (The Descent) vuelve a los cines remasterizada en 4K.
 
En El Descenso lo que prometía ser una expedición terapéutica de amigas a las cavernas, se convierte en una pesadilla luego que un derrumbe deja al grupo atrapado bajo tierra. Lo que viene es la lucha desesperada de seis chicas por sobrevivir, a los depredadores subterráneos (los “crawlers”) y a ellas mismas, pues abajo en la penumbra comienzan a emerger traumas, culpas y rencores.


 
Tras su estreno en 2005, El Descenso obtuvo reconocimiento inmediato en la taquilla: recaudó más de 57 millones de dólares en todo el mundo, veinte veces su presupuesto original. La crítica también le otorgó elogios: con un puntaje del 87 % en el agregador Rotten Tomatoes, fue descrita como “una película claustrofóbica, apasionante, con dirección precisa y actuaciones sólidas de su elenco femenino”. “Salvaje y apasionante”, sostuvo el crítico Roger Ebert; en tanto The New York Times sostuvo que la película proporciona “terror a toda velocidad”.

Terror en 4K: así se verá la remasterización de El Descenso

Dirigida por Neil Marshall (Hellboy, Doomsday), la restauración a 4K de El Descenso supone una re-contextualización técnica imprescindible. Gracias a su cuidadoso diseño de producción —cuevas construidas artesanalmente, texturas de roca realistas, iluminación mínima de origen natural— y al uso de efectos prácticos en lugar de CGI, la película hoy ofrece una experiencia visual y sonora enriquecida. El formato en alta definición realza la profundidad de las sombras y la oscuridad de este inframundo poblado por criaturas letales, entregando una sensación inmersiva indistinguible en su lanzamiento original.